transformó el ambiente en pocos segundos.
Amalia lloraba , Virginia reía ,Braulio sin entenderlas
estaba atónito.
Acababan de dar la sentencia de un hecho lamantable ocurrido
hacía tres años .
La responsable era su esposa Juliana y él ahí sin saber
si reír como Virginia o llorar como Amalia.
¡Estaba libre! ¡La habían declarado inocente!
Había cruzado varios muros para poder llegar a la verdad y nunca pudo
saber quien mentía.
Juliana siempre negó haber estado en el lugar del hecho ,
Hoy la sentencia estaba allí...libre!
No sabía si volvería con ella; había sufrido ¡Tanto!
Levantó su saco y salió del recinto sin ser visto .
Fue al kiosco del florista y eligió las flores blancas
que en cada aniversario le llevaba...
Las miró , las rozó con sus dedos y atrozmente las arrojó
En un cesto.
No volvería a ella , seguía pensando que aquélla madrugada ,
Juliana había matado de dos tiros a su mejor amigo ,su amante ,
según se enteró en el juicio.
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